Alba María Gutiérrez Miembro de la red Periodismo por el Cambio Climático. albamgutierrrez@gmail.com | ||
La pintora venezolana, Mireya Pérez Power comparte dos iniciativas. Una sala expositiva itinerante, habilitada en un autobús que recorre comunidades en Estados Unidos. Y el proyecto Tierra y Agua. Nuestro Planeta. Nuestra Vida, dirigida a los artistas para sensibilizarlos sobre cambio climático y deforestación Mireya Pérez Power es caraqueña. Casi medio siglo, dedicada a la pintura. “Es mi pasión. Me gusta multiplicar mis conocimientos, por eso comencé a ser instructora desde muy temprano. Promuevo que en vez de regañar o castigar a los niños cuando rayan las paredes, les demos papel, creyones y los acerquemos a las Artes”. Pérez tiene en su haber reconocimientos y un extenso número de exposiciones individuales y colectivas. Inició su camino en Venezuela y se perfeccionó en Florencia, Italia. Más tarde fijó su residencia en los Estados Unidos, país donde enseña pintura hasta hoy. Las bibliotecas, librerías y colegios han sido los espacios escogidos para difundir sus clases. La artista compartió dos iniciativas que sugiere replicar en Venezuela. Una de éstas, el Museo Itinerante Piag, que fundó en 2005, en Estados Unidos, para promover el gusto por las Artes entre niños y adultos. Es una organización no gubernamental que cuenta con una sala expositiva rodante. Un autobús que fue donado por la policía. “La forma como proyectamos esta idea partió con cursos en los parques que dictamos a niños con problemas de drogas y alcohol. Llevábamos muchas cosas para hacerles llegar el mensaje. Esculturas, afiches, papel, pinturas. Nos plantemos cómo transportar más cantidad de materiales. Pensamos en un autobús. Averiguamos cómo conseguirlo. Hablamos con un comisionado de la zona, explicamos la propuesta. Enseguida nos llevaron al estacionamiento donde reposan las unidades que han sacado de operaciones. Escogimos el autobús que queríamos. El siguiente paso, hacer un diseño para transformarlo; éste debía considerar al público con discapacidades. Retiramos todos los asientos y los guardamos para que fuesen intervenidos por artistas con temas ecológicos”. El Museo Itinerante Piag es el primer museo de arte rodante de Estados Unidos. Ha participado en eventos para el Gobierno, empresas privadas y escuelas públicas y universidades. Los asistentes reciben explicación sobre cómo funciona un museo, ven obras y herramientas; les asignan tareas (dibujos) que hacen fuera del autobús, mientras escuchan música y les enseñan prácticas amigables con el entorno. “En una mañana, una escuela puede enviar 45 niños a un museo. Pero el museo rodante puede recibir cerca de 1500 niños. Lo hemos hecho en Estados Unidos y Canadá. Ahora, debemos hacerlo en Venezuela. Multiplicar esta experiencia, mostrar a los niños y adultos otras opciones. El arte es una vía para construir mejores ciudadanos” Tierra y Agua. Nuestro Planeta. Nuestra Vida Proyecto dirigido a pintores, músicos, escultores, poetas, intelectuales con el objetivo de sensibilizarlos sobre temas ambientales, especialmente, cambio climático y deforestación. La dinámica comienza con una charla dirigida con especialistas en los temas. “Como los artistas siempre estamos aislados de la realidad. Buscamos dar un giro positivo; involucrarlos para que se sumen a crear conciencia ambiental. Los documentamos para que sustituyan los acrílicos por materiales no tóxicos y que incorporen en sus talleres y casas, prácticas ecoeficientes. Los participantes recrean sus obras en cubos que son exhibidos en la tierra o sobre el agua. Cada uno porta un árbol. Luego, en grupo, siembran todos los árboles, en la zona seleccionada por un ente oficial, según las necesidades de especies y reforestación del país”. Si desea ampliar detalles sobre estas propuestas visite la web http://www.piagmuseum.org |
sábado, 10 de septiembre de 2011
En busca de prácticas verdes replicables (II)
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario